El 25 de Noviembre, día
internacional de la lucha por la eliminación de la violencia contra las mu-
jeres, fecha que nos recuerda la necesidad de unir a la clase obrera contra
todo tipo de violencia, ya sea física, psicológica, económica o sexual que
sistemáticamente se ejerce contra las mujeres, llamamos a las trabajadoras para
que se incorporen a la lucha general de la clase obre- ra por la construcción
del Socialismo-Comunismo.
Los feminicidios y formas
extremas de violencia contra las mujeres se producen en numerosos países del
mundo mediante el infanticidio, aborto selectivo o el abandono de las niñas y
la desaparición o el asesinato sistemático de mujeres jóvenes y adultas. En más
de 70 países se penaliza, persigue, acosa y agrede a las mujeres que no aceptan
la heterosexualidad como norma.
Por eso el 25-N es una fecha
de lucha. En el capitalismo, la mayoría de la población es explotada en sus
puestos de trabajo, maltratada por las situaciones de pobreza y masacrada en
guerras imperialistas con el único objetivo de aumentar los beneficios del
capital.
Las libertades constituyen
un privilegio sólo para una minoría que dirige o apoya esta realidad. La
libertad que el decrepito siste- ma nos concedió a las mujeres para
incorporarnos al mundo la- boral, supone una condena a dobles y triples
jornadas, porque se nos adoctrina a las mujeres en la vocación de servicio y
cuidados a las personas, en la sumisión y en la subordinación. Son muchas las
mujeres que viven atenazadas por el miedo, la violencia y bajo el control de
sus parejas y añadida a esta realidad, la precariedad, el paro, la
desprotección social, la feminización de la pobreza colocan a las mujeres en
situación de absoluta subordinación y esclavitud.
El número de mujeres
asesinadas, las palizas, las denuncias, los acosos aumentan todos los años no
así las denuncias y las órdenes de alejamiento.
Seguiremos viendo cómo se definen
los tipos de violencia hacia las mujeres, poniéndoles nombres, catalogando y
clasificando, elaborando leyes vacías de voluntad política, contabilizando
mujeres muertas… Pero los altos niveles de explotación de nuestra desvalorizada
fuerza de trabajo de la que se beneficia el capitalismo en crisis hace que para
una vida libre de violencia ineludiblemente hay que adquirir conciencia de
nuestra condición de doblemente oprimidas y pasar a la organización de nuestra
fuerza revolucionaria para cambiar esta realidad.
No podemos consentir que la
sobreexplotación que padecemos imposibilite nuestra participación social y
política. Es deber de las organizaciones revolucionarias plan- tear la
organización de las mujeres y de la clase, con una política de género en lucha
frontal con el sistema capitalista, y de su aliado el patriarcado.
Es hora de luchar contra la
violencia que este sistema ejerce contra nosotras en sus múltiples formas! Y
sólo nosotras podemos hacerlo.
No tenemos nada que perder y sí mucho que
ganar!
Organicémonos con el resto
de la clase obrera contra la violencia patriarcal y la violencia capitalista y
construyamos como clase obrera que somos una nueva sociedad que elimine toda
forma de opresión y explotación, la sociedad de seres libres y plenos, la
sociedad socialista-comunista.
COLECTIVOS DE JÓVENES COMUNISTAS | www.cjc.es
PARTIDO COMUNISTA DE LOS PUEBLOS DE ESPAÑA | www.pcpe.es
! MUJER, ORGANÍZATE EN TU PUESTO DE TRABAJO,
EN EL BARRIO, EN EL SINDICATO, EN EL PARTIDO COMUNISTA! ! POR EL FIN DE LA
VIOLENCIA CAPITALISTA Y PATRIARCAL! NINGUNA AGRESIÓN SIN RESPUESTA POR UNA
SOCIEDAD SIN EXPLOTACIÓN NI OPRESION ¡POR EL SOCIALISMO! ¡POR EL COMUNISMO!