El pasado 8 de Julio del presente
año 2013, como consecuencia de la última reforma laboral aprobada por el
gobierno del Partido Popular, más de 1300 convenios colectivos dejan de estar
vigentes.
En dicha reforma se declaró el fin de la ultractividad a un año
vista, es decir, el establecimiento automático de una prórroga en aquellos
convenios colectivos 'caducados' o denunciados ante la justicia burguesa
mientras no hubiese acuerdo sobre uno nuevo.
Al perder cada uno de ellos su
vigencia, si no hubiese la firma de uno nuevo, la empresa podrá acogerse al equivalente
superior, y en caso de no existir, al Estatuto de los Trabajadores, lo que
permitiría al empresario comprar la fuerza de trabajo al valor del Salario
Mínimo Interprofesional (SMI), establecido en 2013 en 645,30 euros al mes.
La Juventud Comunista se posiciona totalmente en contra de este ataque,
inserto en la estrategia del bloque oligárquico-burgués para frenar la
tendencia decreciente de la tasa de ganancia, pudiendo dejar a cerca de 2
millones de trabajadores en la misma situación que hace más de cinco décadas,
cuando no existía la negociación colectiva, conquistada en un proceso de lucha
obrera y popular que culminó en la huelga de 1962 en plena dictadura.
Ante esta situación, los Colectivos de Jóvenes Comunistas hacen un
llamamiento a la juventud obrera a comenzar un proceso de movilización
sostenida que comience por articular la defensa de los derechos de la misma,
transformándolo en una contraofensiva obrera y popular, avanzando en el impulso
de Comités para la Unidad Obrera (CUO) en cada centro de trabajo, como
herramientas de organizacion obrera en la perspectiva del socialismo.
Oficina de Prensa del Comité Central de los CJC