UPOA ya lo decíamos en julio
de 2017, el Alcalde y el PSOE estaban negociando cómo éste iba a salir de la alcaldía,
cómo iba a ser su dimisión. Vergonzosamente es con dinero, todo por dinero.
Francisco
Juan Martín dimite como Alcalde, pero no como Concejal, lo que le permite seguir
siendo Diputado en la Diputación de Córdoba, cobrando cerca de 50.000 euros
anuales (y ya veremos, después de que acabe esta legislatura, si la negociación
ha ido más allá y en qué puesto de trabajo queda colocado Francisco Juan
Martin; lo seguiremos muy de cerca), y la Alcaldesa seguirá en su puesto los 16
meses que quedan para las próximas Elecciones Municipales, cobrando 2.500 euros
14 veces al año, es decir, 35.000 euros anuales para alguien que venía de no
cobrar nada (¿ o sí?).
¿Y qué dice el PSOE? ¿Cómo explica
el PSOE la dimisión de dos Concejales y del Alcalde en esta legislatura?
¿Cómo explica el PSOE que en la anterior legislatura dimitiera el Alcalde Francisco Paniagua a
mitad de legislatura y que en esta le dimita de nuevo, otra vez el Alcalde,
esta vez Francisco Juan Martin, quién entonces lo sustituyó?
El PSOE no da explicaciones,
está políticamente tan podrido internamente que le da igual reírse del pueblo
de Aguilar y ha mantenido esta situación únicamente por interés partidista. ¿Y
mientras tanto los proyectos para Aguilar dónde están? ¿Y mientras tanto la
construcción del parque agroalimentario dónde está? ¿Y mientras tanto la
creación de empleo dónde está? ¿Y mientras tanto la construcción de viviendas
dónde está? ¿Y mientras tanto la puesta en marcha de servicios municipales de calidad
dónde está? etc, etc. Ninguna respuesta por parte del Grupo Municipal del PSOE
ni, por su puesto, de su Ejecutiva Local.
El PSOE, de manera
políticamente deshonesta, acuerda que el peaje de la dimisión del alcalde lo paguen
los ciudadanos, mientras ellos ya están inmersos en la preparación de las
próximas Elecciones Municipales.
Nuevas promesa, nuevos engaños, más traiciones,
más peajes, es lo único que puede proponernos el PSOE local a los aguilarenses,
pero explicaciones ni una.
Por otro lado, lo que ha
hecho Francisco Juan Martín no tiene nombre.
Ha engañado a todo un pueblo, ha
traicionado la confianza de todos sus votantes y ha dejado una gestión
municipal a la deriva, que terminará, muy probablemente, con problemas
económicos y presupuestarios para nuestro Ayuntamiento y, por tanto, para
nuestro pueblo.
Además, lo ha hecho, políticamente, de la manera más ruin y deshonesta.
Francisco Juan Martín ha estado alrededor de un año de baja en Diputación, lo
que le ha servido para quitarse del medio por la puerta de atrás de su
responsabilidad como Alcalde. Ha estado trabajando en Diputación y visitando
algunos pueblos de la Provincia de Córdoba en calidad de su cargo como
Diputado, y acompañando al Presidente de la Diputación de Córdoba, al mismo
tiempo que abandonaba el sillón de Alcalde de Aguilar de la Frontera. Ha
enseñado su verdadera personalidad y también su verdadera ideología.
Aquellas
personas de derechas que el día de su investidura tanto sonreían, deben de
tener ahora caras muy largas. Y el PSOE, que lo presentó como un Alcalde de
izquierdas sabiendo que era ideológicamente de la derecha más reaccionaria de
este pueblo, deberían entender ahora que no todo vale para conseguir votos,
incluido el hecho de poner a un políticamente reaccionario derechoso al frente
de una candidatura, como el PSOE ha hecho.
¿Qué pasará ahora? Nada más allá
de lo que tenemos, y ahí incluimos las discrepancias internas que el Grupo Municipal
de PSOE tiene entre ellos. Ya lo han advertido en la misma nota de prensa que
han mandado a todos, menos a los demás Grupos Municipales que componen la Corporación Local, y dónde ya se anuncia
que la candidata a la alcaldía será María José Ayuso.
Dice la Alcaldesa
accidental (todavía) que “el trabajo en el Ayuntamiento seguirá en la misma
línea que hasta ahora”. Es decir, que pasen rápido estos 16 meses, el dinerito
al bolsillo, unas nuevas Elecciones Municipales y borrón y cuenta nueva, aquí
no ha pasado nada. Que nadie espere, por tanto, ninguna solución a sus
problemas desde el Gobierno del PSOE, cuyos miembros están más pendientes de
mirarse su ombligo que de los problemas de Aguilar (incluidos, por supuesto,
Francisco Juan Martín y María José Ayuso).
Vergonzosamente, el dimitido
alcalde no ejercerá como Concejal. Estamos convencidos de ello. Ese entendemos
que es el acuerdo entre Francisco Juan Martín y el PSOE: no volver a pisar más
el Ayuntamiento, a no ser que sea para arreglar algún asunto personal. No
dimite como Concejal, lo que impide que otra persona que figuraba en la lista
del PSOE acceda al Ayuntamiento para trabajar por su pueblo ¿Por qué? ¿Tiene
esto algún sentido? ¿Le asignará la Alcaldesa alguna delegación?.
Evidentemente todo esto está
más que negociado: dimisión y no volver a cambio de un puesto en la Diputación de
Córdoba, para lo que es imprescindible no dimitir como Concejal. Y para muestra
un botón. Francisco Juan Martin presenta su dimisión el martes 23 de Enero a
primera hora de la mañana y a las 10,23 horas
de esa misma mañana ya había enviado el Ayuntamiento una nota de prensa,
dónde se anunciaba la dimisión y que la nueva candidata será María José Ayuso
¿En tan poco tiempo el PSOE ya había decidido quién era la candidata si no sabía
que se iba a producir esta dimisión? Esto no hay quien se lo crea, todo atado y
muy bien atado. Cambiar para que nada cambie.
El Ayuntamiento, de nuevo, usado
por el PSOE como moneda de cambio para sus juegos de tronos internos, como
medicación para su descomposición interna. Sin lugar a dudas, a esta situación
le intentarán dar un lavado de cara en estos meses que quedan para las próximas
Elecciones Municipales.
UPOA consideramos que
Aguilar de la Frontera no se merece esto
y hacemos un llamamiento público a la construcción local de una
alternativa política de izquierdas que, basada en la unidad popular, sea capaz
de configurar un programa y una candidatura basada en la municipalización de
los servicios municipales; en la apuesta por los servicios públicos de calidad;
en la puesta en marcha de políticas de justicia social; en un urbanismo popular
al servicio del pueblo y no de la especulación; en la construcción de
viviendas; con una gestión municipal basada en la participación ciudadana, en
la búsqueda de futuro para nuestros jóvenes; en la puesta en marcha de
proyectos sociales, en la creación de empleo estable y de calidad, entre otros.
Una alternativa que sea capaz de revertir la actual situación, poniendo el Ayuntamiento
al servicio del pueblo y no de los intereses personales y partidistas del PSOE.