Una vez más la ONU está actuando como instrumento de legitimación de las políticas imperialistas, aprobando la adopción de medidas que suponen un verdadero genocidio del pueblo libio. Igual que ocurrió en la antigua Yugoslavia, en Irak o en Afganistán, los peones de las potencias imperialistas se escudan, previa una campaña brutal de intoxicación informativa, en supuestas “misiones humanitarias” para proceder a la invasión de países y eliminación de gobiernos que, por diversas circunstancias consideran molestos, incluso, como es el caso de Libia, habiendo sido éste hasta hace bien poco aliado imprescindible del imperialismo europeo y sus multinacionales en la zona.
Condenamos de manera contundente la intervención militar en la que están participando varios estados, entre ellos España y denunciamos el doble rasero con que dichos estados justifican sus ataques bajo la excusa de la defensa de los derechos humanos de la población Libia, cuando jamás han promovido la defensa de estos mismos derechos humanos para pueblos que están siendo sometidos a genocidios y que además la ONU ha reconocido en su propias resoluciones, siendo los ejemplos más claros los pueblos saharaui y palestinos.
Además denunciamos y condenamos el hecho de que en este conflicto se utilice las bases de Rota y Morón como enclaves esenciales de la OTAN para las operaciones militares de ataque contra otros pueblos y que se destine a la guerra miles y miles de millones de euros mientras a la clase trabajadora y capas populares se nos reduce y congelan los salarios, se recortan las pensiones, se anulan otros derechos adquiridos con años de lucha y sacrificios, todo ello mientras el paro no para de aumentar.
Esta intervención es la expresión extrema de la violencia estructural con que, un sistema senil como el imperialismo, responde ante cualquier conflicto. La guerra y la violencia estatal sin límites puesta a disposición de las clases dominantes para asegurarles la explotación de la clase trabajadora y el expolio de los recursos naturales
El PCPA-PCPE y los CJC consideramos que no existen posiciones intermedias en momentos como éste en el que el imperialismo despliega sus garras impunemente y condena a la muerte y a la miseria al pueblo libio y hacemos un llamamiento a la clase obrera y al pueblo en general para que intensifiquemos nuestra lucha para conseguir que se acabe esta aventura militar de consecuencias desastrosas para el propio pueblo libio y para el conjunto de los pueblos y la paz internacional. El conflicto libio debe ser resuelto por una vía pacífica y democrática, respetando la soberanía y la integridad territorial de Libia, sin injerencias de ningún tipo.
¡NI UN EURO PARA LA GUERRA!
¡ALTO A LA AGRESIÓN MILITAR IMPERIALISTACONTRA LIBIA!
¡FUERA EL IMPERIALISMO DE ÁFRICA Y ORIENTE PRÓXIMO!
¡VIVA LA LUCHA DE LOS PUEBLOS ÁRABES!